Uso frente al coronavirus
La hidroxicloroquina es uno de los medicamentos que se prescribió en pacientes hospitalizados con covid durante la primera oleada del virus, a pesar del bajo nivel de evidencia. Ahora un estudio señala que podría haber causado casi 17.000 muertes prematuras en seis países analizados en un estudio científico, unas 2.000 en el caso de España.
Así lo pone de manifiesto un estudio que recoge la revista Biomedicine & Pharmacotherapy, en el que un equipo de investigadores franceses ha estimado la mortalidad prematura asociada a ese tratamiento en seis países: Bélgica, España Francia, Italia, Turquía y Estados Unidos.
Durante la primera oleada de covid, el tratamiento con hidroxicloroquina (HCQ) se utilizó "de forma no autorizada a pesar de la ausencia de pruebas que documentaran sus beneficios clínicos", subrayan los autores.
El objetivo de los investigadores ha sido calcular el número de muertes atribuibles a este tratamiento en los países donde se aplicó a pacientes hospitalizados durante los dos o tres primeros meses de la pandemia.
Las características farmacológicas de cloroquina e hidroxicloroquina y algunos experimentos in vitro, explica López Briz, “condujeron desde el principio a probar su uso en los pacientes con Covid-19, en un intento desesperado por mejorar una enfermedad para la que no se disponía de ningún arma efectiva”.
“A pesar de los esperanzadores resultados de primera hora del grupo marsellés de Raoult”, continúa, “la mayor parte de los estudios posteriores con un diseño más correcto metodológicamente han concluido que su papel es dudoso o inexistente”. Como pasa en todos los estudios clínicos, “siempre hay pacientes que mejoran con la intervención, pero la manera de saber si esta mejora se debe al proceso normal de la enfermedad o al fármaco es hacer estudios con un grupo control, de placebo o de otro medicamento, que es lo que conocemos como ensayo clínico”.
Según recogió la Aemps, “aunque los datos son limitados, cloroquina/hidroxicloroquina constituyen un potencial tratamiento para COVID-19 y se están utilizando en la práctica clínica de forma extensa en estos pacientes, a dosis superiores a las recomendadas en sus indicaciones autorizadas y frecuentemente en asociación con azitromicina”.
Pero también advertía de que, “es conocido que la hidroxicloroquina puede prolongar el intervalo QT del electrocardiograma (ECG). Este riesgo aumenta con dosis altas y con el uso simultáneo de azitromicina u otros medicamentos con potencial de prolongar el intervalo QT4 y los resultados de un estudio reciente realizado en pacientes infectados por SARS-CoV-2 sugieren lo mismo”.
Su uso por tanto “no es recomendable en pacientes con factores que aumentan el riesgo de prolongación del intervalo QT tales como síndrome congénito de intervalo QT largo, desequilibrio hidroelectrolítico no corregido o en tratamiento simultáneo con medicamentos que pueden alargar el intervalo QT del ECG. En caso de administrarse, se deberá extremar la precaución, realizando un seguimiento estrecho del paciente”.
Por ello, Perelló recuerda que, antes de iniciar un tratamiento se debe comprobar:
Analítica más reciente
Frecuencia cardíaca
Comorbilidades. Ya que se recomienda no iniciar el tratamiento con hidroxicloroquina en caso de síndrome coronaria aguda, insuficiencia cardíaca, etc.
Medicación concomitante. Para ello se revisarán las interacciones y el uso concomitante de otros fármacos.
https://cuidateplus.marca.com/medicamen ... 73466.html
Cuas cuas cuas. Lo sospeché desde un principio
O sea que tal "estudio" es dudoso segun los científicos.